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Arte rupestre del Sistema de Pen, Cumayasa, Repblica Dominicana



Daniel DuVall. [email protected] / http://www.danielduvall.com
B.S University of Massachusetts, Amherst, MA USA. MFA Bard College, Annandale on Hudson, NY USA.



INTRODUCCIN

Hay cuevas incontables distribuidas en todas partes de la Repblica Dominicana, de las cuales ms de 400 contienen arte rupestre (Atiles Bid 2009: 91). La isla fue poblada hace alrededor de 6000 aos por gente de Amrica Central y/o la Pennsula de Yucatn (Wilson, 1997: 4). Migraciones posteriores llegaron desde la regin del Orinoco, al noreste de Suramrica y entre ellos los que llegaron a formar la etnia de los Tanos, que tuvieron la mala suerte de estar presente cuando lleg Coln a La Espaola en 1492 CE (Rousse, 1992: 1). Su poblacin fue destrozada por los espaoles y su cultura fragmentada irreversiblemente en veinte aos y despus de 50 aos casi todo la poblacin indgena fue irradicada (Alegra en Wilson: 1997: 11). Fray Ramn Pan cuyas fuentes eran relatos de primera mano respecto a los Tanos, escribi en 1498 que las cuevas eran muy importantes en la cosmologa de los Tanos. Pedro Mrtir de Anglera, otro contemporneo de Coln, escribi que “la poblacin indgena haba creado el arte rupestre en las cuevas y que haba una cueva adornada con mil tipos de pinturas." (Pan 1999: 50) Pedro Mrtir nunca visit el Nuevo Mundo y no es cierto cuales eran sus fuentes de informacin. Es posible que sus escritos sean apcrifos, aunque hoy en da se conocen varias cuevas que tienen alrededor de 1.000 pinturas.

Cumayasa

La regin de Cumayasa, ubicada en la costa del Caribe (Fig. 1), se encuentra a unos 10 km de La Cueva de Las Maravillas (la cueva ms conocida en el pas que est abierta al publico y que tiene alrededor de 270 pictogramas [Fig. 2]). El suelo est compuesto de una fina capa de tierra negra donde se desarrolla un matorral bajito entre cual a veces aflora el karsto desnudo. Hay muchos sumideros, tanto grandes como pequeos y es posible descubrir cuevas al uno caer inadvertidamente en uno de los huecos del camino. Los pocos habitantes viven de la fabricacin y venta de carbn y la crianza de chivos, cerdos y mulas. Los carbohidratos principales en su dieta provienen de un pan, preparado con la misma receta que usaba los Tanos, hecho de los tubrculos de la ccada Zamia debilis conocida en la regin como guyiga. La zona est casi sin cambios desde los tiempos precolombinos aparte de la presencia de los grandes mamferos importados por los espaoles.

Fig. 1 Mapa de la Repblica Dominicana ubicando las cuevas de Cumayasa.
Fig. 2 de Cueva de las Maravillas, San Pedro de Macoris.

Durante los ltimos aos, Alain Gilbert y Eric Labarre, dos espelelogos ses, han explorado esta rea buscando cuevas. La mayora de las cuevas que se han encontrado tienen unos petroglifos en las entradas y, ms adentro, muchas de las cuevas tienen aislados pictogramas, la mayora pintada con lneas dbiles o que se han erosionado con el tiempo. En abril de 2005 Gilbert y Labarre encontraron la cueva que llamaron Sistema del Pen y en abril de 2009 Gilbert, junto al autor del presente trabajo, encontraron la seccin del sistema al que nombramos Vidal, el nombre del propietario de la tierra. El sistema tiene un desarrollo de ms de 5 km y contiene por lo menos cuatro sitios importantes de arte rupestre con ms de 350 pictogramas (Gilbert 2009: 74-81) y Labarre (Labarre: 2008: 33). En la figura 3 se encuentra un mapa provisional que muestra la ubicacin relativa de los tres sitios de arte rupestre tratado en detalle en este artculo.

Fig. 3 Mapa provisional del Sistema de Pen, Cumayasa.

El propsito del texto siguiente es comenzar la descripcin de tres de los sitios de arte rupestre dentro del Sistema del Pen tan objetivamente y en una manera tan detallada como posible.


Sistema del Pen: el marrn

Dentro de la entrada de Pen, todava en la zona de penumbra, hay dos excavaciones rectangulares, de 1m x 2m y menos de 1m de profundidad. Cerca hay una pila de cuatro fragmentos de estalactitas. No hay ni graffiti de origen moderno, es decir escrito con nombre y fecha, ni basura de origen humano. Las cuevas que en esta rea sufren muchas visitas de personas siempre muestran tales evidencias.

130 metros de esta entrada el pasaje dobla a la izquierda y, plasmado en la pared izquierda, hay un de 6,5 m de largo, con aproximadamente sesenta pictogramas (Fig. 4). Uso la palabra ‘pictograma’ aqu en lugar de ‘pictografa’ porque no hay ninguna indicacin de que algunos de estos motivos representen palabras. Esto es para coincidir con las definiciones en Rock Art Glossary (Bednarik et al. 2003). Un grueso estrato de murcielaguina se encuentra bajo los pies y hay trazos de la misma, tirado naturalmente en el muro por murcilagos en vuelo. Se ven estas marcas arriba de los motivos por la izquierda en Fig. 4. El arte en esta pared est protegido porque se aleja en la base. Est en oscuridad total. No ms de cuatro o cinco murcilagos se observaron durante mis cuatro visitas al sitio.

Fig. 4 marrn, Sistema de Pen

Se registran dos colores de marcas que se encuentran en el , que indica el uso de dos sustancias diferentes como pintura. La mayora de las figuras se hacen con pigmento marrn, que es el mismo color que la murcielaguina en el suelo, pero hay algunas otras marcas de color negro. Casi todas las marcas de color negro tienen la medida de 1 cm o menos de ancho y parece que fueron dibujadas usando pedazos de madera carbonizada. Todas las marcas de color marrn en el centro del mural son ms anchas, algunos de ms de 2 cm. Las marcas de marrn ms a la derecha son hechas con trazos mas finos.

El pigmento marrn es grueso, de hasta unos 4 mm, y ahora est seco y agrietado. Debido a su grosor debe haber sido aplicado como una pasta, posiblemente con los dedos. El pigmento ha exfoliado en algunos lugares, a veces, revelando un sustrato de color ms claro (Fig. 5), pero hay otros lugares donde aparentemente el pigmento exfoli y dej el fondo del mismo color que en las zonas sin nunca haber sido decoradas. Hasta ahora, no he encontrado en el suelo nada del material exfoliado.

Fig. 5 Pigmento grueso y parcialmente exfoliado, Sistema de Pen.

Un motivo en este utiliza ambos pigmentos. Por desgracia, no se superponen los dos pigmentos de manera que una secuencia pudiese ser establecido (Fig. 6). La mayor parte del pigmento marrn en el Pen tiene un crecimiento minsculo amarillo asociado que parece ser hongo o bacteria (fig. 7). (Durante una visita subsecuente ms poblaciones de este crecimiento fueron observados y menos vinculados con los pigmentos. Quizs viene y va con las temporadas, de todos modos se necesitan mas observaciones.)

Fig. 6 Motivo con dos colores de pintura, Sistema de Pen.
Fig. 7 Microorganismos asociados con los pigmentos, Sistema de Pen.


En 1972, Marcio Veloz Maggiolo tom algunas muestras de los pigmentos—o mejor decir residuos de pinturas-- de La Cueva de las Maravillas que queda cerca de Pen y tiene figuras pintadas en un estilo similar y, al examinar con microscopio electrnico, encontr la presencia de caoln y goethita (Veloz y Galvn 1976: 144), ambos siempre estn asociados con murcielaguina (Abru 2005, y com. pers.). Ya hay un precedente para el uso de murcielaguina en la pintura de los pictogramas en La Espaola.


Sistema del Pen: estras del dedo o acanalado por dedos

Unos 70 metros ms all del marrn en un callejn sin salida aparente hay una roca en forma de un yunque de herrero (Fig. 8), con una altura de 1.3 m por 2.4 m de ancho. Su rostro est cubierto con estras ejecutadas con los dedos y otras incisiones, posiblemente tanto antrpicos y naturales (Figs. 9a & 9b).

Fig. 8 Dibujo de un yunque de herrero.
Fig 9a El Yunque con estras de dedos en su entorno, Sistema de Pen
Fig. 9b El Yunque con estras de dedos, Sistema de Pen.

“Estras del dedo” son ranuras sub-paralelos hechas por arrastrar los dedos humanos sobre una superficie blanda (como mondmilch) en una cueva de piedra caliza (Bednarik 1986, 2001: 197) y se han registrado en Francia, Espaa, Australia y Nueva Guinea (Bednarik 2001: 41; Sharpe y Van Gelder 2006a). Surgieron muchos trminos para denominar esta clase de marcas tales como trazos del dedo, meandros, macarrones o huellas traceolgicas. Aqu adopto la frase acuado por Bednarik de estras del dedo aunque acanalado por dedos ha sido propuesto por Echevarra Lopez. Aunque hay muchos reportes de estras del dedo en las cuevas decoradas en el pleistoceno en Europa y Australia, son escasos en este hemisferio y la publicacin de Gilbert en 2009 puede ser el primero. Tengo reportes por comunicacin personal de la existencia de estras del dedo en Cueva del Chorro, Maimn y Cueva del Ro Cidra, Rio Limpio pero parece que estas marcas fueron hechas por arrastrar los dedos sobre una capa de lodo puesto en el muro. En tal caso se consideraran como pictogramas ya que el proceso es aditivo (Bednarik: 2001: 202).

El mondmilch o moonmilk en el Sistema de Pen es seco ahora pero no es duro. No hemos podido encontrar ningn otra estra del dedo en la cueva, aunque existen superficies blandas presentes en otros lugares. Para poder continuar ms all por el pasaje hay que apretarse por la punta del cuerno del 'yunque'. Una salida queda unos 80 metros de distancia. El "yunque" est protegido por una protuberancia de la roca situada arriba y se encuentra en la oscuridad total.

Estudios serios y discusiones analizando las mediciones de estras del dedo han sido publicados, en particular por Bednarik (1986, 1987, 2004, 2008); Aslin y Bednarik (1984a, 1984b) y Sharpe y Van Gelder (2006a, 2006b). No se puede ejecutar anlisis tan detallados aqu debido al pequeo numero de estras. Los anlisis y conclusiones hechos por Van Gelder son basados en estudios de ms de 500 metros cuadrados de estras del dedo en la cueva de Rouffignac, Francia, mientras que la cueva de Pen tiene solo 2 metros cuadrados de estras. Me conform con medir la anchura de los tres conjuntos de huellas, borde a borde, y llegar a la conclusin de que todas la estras midiendo entre 36 y 40mm fueron efectuadas por un nio o un joven (Bednarik pers. Com.). Esta regla se apoya en Stapert (2007).

El estudio de Sharpe y Van Gelder (2006b) supone que "la gente que crearon las estras [Cueva de Rouffignac, Francia] eran de un tamao anatmico similar a la gente moderna (segn los estudios anatmicos de Cro Magnon)”. No es del todo claro si esta suposicin es vlida para los Tanos o sus predecesores de origen arauaco en La Espaola.

Los ms estrechos de los conjuntos de tres huellas que encontr eran de 35 mm, 36 mm, 37 mm, 39 mm y 40 mm. Estas medidas sugieren que los jvenes probablemente hicieron estas marcas. Esta conclusin se ve resforzada por la baja altura de las huellas y la angostura del pasaje detrs del "yunque" posiblemente era atractivo para los nios aventureros. Por falta de experiencia ma es difcil identificar conjuntos, asociacin a mano derecho o izquierdo del artista o artistas, o secuencias probables de la marcas. Sin embargo se puede observar en las intersecciones de los conjuntos que las estras hechas con un solo dedo se realizaron ltimamente (Fig. 10).

Fig. 10 Estra de un solo dedo hecha despus del conjunto de estras.

Sharpe y Van Gelder (2006b) han desarrollado una taxonoma de estras del dedo bastante compleja que utiliza nomenclatura para denominar las variedades de las estras hechas con movimiento de los brazos solos, con movimiento del cuerpo sin mover los pies y hechas mientras caminaba. Tambin existen denominaciones para los conjuntos que estn compuestos de una o mas de una estra. En Pen la mayora de los conjuntos son largos y presentan tres estras. Varios escenarios son imaginables; podran haber sido hechos de forma continua sin pararse. Pero tambin el/la estriador/a poda haber detenido el movimiento de su mano en el momento en el cual su brazo no tena mas alcance, reanudando despus de cambiar de posicin y volviendo a insertar los dedos en las estras. Una acumulacin de material no siempre se acumula al final de una serie de estras (Sharpe y Van Gelder 2006b) y pero es imaginable que el material sobrante haya sido eliminado en el momento en cual el artista, despus de cambiar su posicin reanud con su actividad. Una opcin ms probable sera que el/la estriador/a, de pie o de rodillas, se puso en el centro de la roca e efectu las estras con la mano izquierda por el lado izquierdo de la boca y para la parte derecha con la mano derecha. Los movimientos se podan hacer simultneamente o de forma secuencial sin necesidad de tener que mover los pies. La posicin menos probable tomado por el/la estrador/a se menciona aqu slo para decir que habra sido fsicamente posible para el/la estrador/a de acostarse prono encima del yunque y hacer las marcas extendiendo los brazos por abajo.

La mayora de las estras parecen no ser figurativas pero hay cuatro motivos localizados en la regin superior del yunque que pueden ser antropomorfos- en particular el segundo motivo de izquierda - que se ejecuta con un solo dedo es que puede indicar que el trabajo se realiz en dos sesiones separadas, o por estradores/as mltiples, o por un/una estrador/a misma despus de completar el diseo de dedos mltiples.

Visualmente, el material en las depresiones de las estras es de color ms claro que el mondmilch intacta y parece ms denso que en las zonas vrgenes, lo que indica que las estras se hicieron por la compresin y no era un proceso sustractivo, como se inform por Bednarik (1986) para el material de Australia. El color en las depresiones es consistente en todas las estras lo que sugiere que todo el trabajo era hecho en un sesin.

Algunas estras eran evidentemente talladas de nuevo por una herramienta de una sola punta o por una ua aguda (Fig. 11).

Fig. 11 Estra tallada de nuevo con una punta.

Hay una serie vertical de abrasiones formando como una banda que atraviesa la base del 'yunque' en una altura de 6,5 cm hasta 50 cm. La mayora no estn ms de 30 cm de alto por encima del nivel del suelo actual, pero hay varias que se encuentran a la altura de un metro. La base del "yunque" es ms oscura que el color en las zonas ms altas, lo que posiblemente indica un nivel de piso ms alto en el pasado. Las abrasiones que cruzan las estras del dedo se hicieron posteriormente a ellas. La mayora de las abrasiones se presentan en grupos de tres que miden 12 mm de ancho o cuatro que miden 16 mm de ancho (Fig. 12). No es probable que el yunque haba bloqueado el pasaje de un pequeo animal que hubiese araado este mismo para abrir paso porque el pasaje a su alrededor es suficientemente amplio para un tal animal. Sin embargo, Bednarik (1991) ha investigado extensamente marcas naturales ubicadas dentro de cuevas, sealando que la altura de los araazos de los animales por encima de los pisos depende enteramente de las habilidades de escalar de la especie en cuestin, y ha observado que "las marcas no-humanas son miles veces ms comn en las cuevas que las incisiones lineales hechas por los seres humanos" (Bednarik 2004). En nuestra ultima visita observamos ms de tales abrasiones en otros sectores de la cueva y, luego, al acercarnos a la salida, observamos un roedor parecido a una rata de gnero desconocido corriendo subiendo paredes en forma casi vertical. Probablemente las abrasiones fueron hechas por este tipo de animal.

Fig. 12 Abrasiones probablemente hechas por un animal.

En un pasaje por otro lado en la Cueva de Pen observamos un grupo de lo que pareca ser puntas de los dedos estampadas de carbn. Estos se localizan en las crestas espeleotemas verticales de la pared de la cueva y de forma horizontal (Fig. 13). Las impresiones individuales miden 10-13 mm de ancho y 10 a 21 mm de longitud. El espacio entre las impresiones es irregular. Mis experimentos de replicacin con pintura ltex blanca en madera bruta sugieren que las huellas fueron hechas por los adultos una tras otra.

Fig. 13 Puntas de dedos estampadas de carbn.


Zona de Vidal: el de carbn

Al penetrar en la entrada de la zona de Vidal hay que bajar la cabeza para evitar una formacin que est decorada con un pictograma indistinto y pasar por un piso resbaloso, bajando por la oscuridad total hasta una apertura en forma de tringulo con punta haca arriba (Fig. 14). A la derecha de esta apertura en la pared cerca de 2 m sobre el nivel del suelo hay varios pictogramas pequeos. Uno de ellos parece ser una cara con dos patas conectadas directamente a la barbilla. Es un motivo comn que se puede observar en el arte rupestre precolombino-- como en el marrn en Pen (Fig. 4)-- y tambin en la cermica de la Repblica Dominicana. Detrs de la apertura hay un pasaje de cerca 14 m de largo, que est decorado con pictogramas por la mano derecha (Fig. 15). Hay oscuridad total en las cercanas del arte rupestre aunque ms adelante por este pasillo hay pequeos agujeros en el techo que dejan entrar los rayos de luz. La sala est bordeada a mano derecha por una plataforma de 1m de altura donde debe haber estado de pie el artista o artistas se present de pie mientras pintaban las figuras plasmadas en el muro. No hay marcas en la pared opuesta, aunque hay una formacin natural, corta y cnica de ese lado donde se encuentran depositadas pilas de restos carbonosos en todas las superficies horizontales disponibles. Estos restos podran haber sido utilizados por los artistas en la elaboracin del arte rupestre o podran ser los restos de los fogatas utilizados para hacer luz dentro de la cueva - o podran haber sido dejados por visitantes ms recientes y no estar relacionados a las actividades artsticas.

Fig. 14 Dentro del rea de Vidal, la entrada al saln donde est el de carbn.
Fig. 15 de carbn, rea de Vidal, Sistema de Pen.

Hay huecos que miden desde 20 hasta 40 cm de dimetro en la pared a lo largo de la parte posterior de la plataforma y a la altura de los pies. Algunos de estos no son ms que bolsas, pero otras tienen la longitud de un brazo y contienen pequeas pilas ntidas de pedazos de carbn (Fig. 16). No hay evidencia de que inundaciones pudieron haber llevado estos restos aqu y tampoco este carbn se puede haber cado por gravedad. Aunque su ubicacin no indica una asociacin obligada con los pictogramas, podra valer la pena intentar fechar muestras por mtodos de C14.

Fig. 16 Bolsas donde se encuentra pedazos de carbn, aparentemente guardados.

El crecimiento amarillo que era abundante en las zonas del marrn en Pen fue visto aqu tambin en las paredes, pero mucho menos profuso. Identificacin y anlisis de este organismo requerira la eliminacin de unas muestras por un especialista adems la identificacin de bacteria troglodita es sumamente difcil ya que la mayora no crecen en nutritivos en el laboratorio y es necesario identificarlas por estudios de filogenia molecular (Barton 2006: 44)

Los trazos que componen los pictogramas parecen ser hechos con carbn vegetal por su coloracin, y miden desde los 2-3 cm de ancho. Este material se aplicaba en capas gruesas hasta llenar algunos huecos de la piedra caliza, lo que implica que la pintura pudo haber sido una pasta muy espesa o el pigmento poda haberse aplicado a partir de un carboncillo humedecido con agua o aceite (Fig. 17). Donde hay una aparente falta de pigmento no se puede saber con seguridad si fue exfoliado o nunca estuvo presente en esos lugares. Debido a la superficie rugosa y irregular de la pared en la mayora de las reas, no puedo deducir como el carbn pudo haber sido aplicado. Sin embargo el el motivo vertical en zigzag ubicado en lo alto de la parte central del se ve claramente que fue aplicado mediante un solo dedo (Fig. 18).

Fig. 17 Detalle de residuo de pintura, rea de Vidal.
Fig. 18 Zigzag motivo, rea de Vidal.

En la parte superior del zigzag hay una lnea curvada en forma de S que parece haber sido elaborada en un solo movimiento del dedo. Esta superpone el comienzo del zigzag cuyos primeros cuatro segmentos fueron tambin hechos por un solo movimiento del dedo. Los cinco siguientes segmentos al contrario fueron hechos discontinuadamente de arriba por abajo y su inicio se superpone al final de los primeros cuatro. Hay un otro motivo cercano formalmente similar, asociado al motivo antropomorfa en el extremo derecho del , pero este zigzag se ha elaborado con un movimiento continuo y consiste en menos segmentos.

En un motivo se nota que el pigmento ha sido alterado por tocar posteriormente de la aplicacin por el propio artista o por algn visitante. En 1978 tomaron fotografas en unas cuevas del Pomier (Pagn, 1978). Comparando estas fotos con otras mas recientes se puede observar daos similares (DuVall 2008). Tambin yo he observado pictogramas daados en Cueva #2, El Pomier y en Hoyo de Sanabe dentro de los ltimos siete aos.

El grupo de cuatro figuras en el extremo izquierdo del (Figs. 19, 19b, 19c) es el ms interesante, ya que est parcialmente cubierto por una capa de espeleotema o depsito endokrstico granular y seco. Esta capa parece ser de ms de 5 mm de espesor, pero sin quitar o sondear reas no puedo decir qu morfologa tiene el sustrato del fondo. Excepto en el permetro, la estimacin del espesor es conjetural.

Figs. 19a, b, c. Motivos parcialmente cubierto con una capa de espeleotema, rea de Vidal.

La porcin inferior de la figura ms baja (asumo que el motivo es antropomorfo) no est cubierto por espeleotema, a lo mejor debido al ngulo de la pared o al hecho de que este material intruso no se expandi mas. Las marcas son de color negro. La parte de la misma figura est casi recubierta de manera que no se pueden distinguir las lneas menos de un trazo que sugiere la forma de una oreja. Esta figura se ejecut con los mismos trazos anchos que caracterizan la mayor parte de los pictogramas.

Por encima y un poco a la derecha se localiza la posible representacin posible de una cabeza con un tocado que consiste en una caja atravesada por dos lneas diagonales - este motivo no es raro aqu y, de hecho, tambin se puede observar en la parte central del . Figura 20 ilustra un motivo similar en El Pomier. Fijase tambin en el pequeo motivo negro en la Fig. 4 justo a la derecha de los tres grandes antropomorfos en el lado izquierdo en el marrn en Pen. Es difcil saber si este pigmento ha sido cubierto por una capa de espeleotema tan fina que las lneas se pueden observar a travs de ella, o si el pigmento se ha difundido a travs del nuevo depsito de superficie, o si las lneas fueron pintadas durante un perodo de deposicin en la parte superior de material hmedo y luego cubierto con una capa delgada precipitada posteriormente.

Fig. 20 Motivos de Cueva del Puente, El Pomier que tambin utiliza un
cuadro atravesada por dos lneas diagonales.

El motivo ms alto en este grupo parece ser tambin una cabeza con un tocado puesto, pero este 'sombrero' tiene forma de dos antenas, cada una a su vez coronada por un pequeo crculo dividido en dos (Fig. 19c). El motivo es parcialmente oscurecido por una capa opaca y gruesa de espeleotema. Estas lneas parecen estar relacionadas con el motivo pintado de zig-zag, tanto en anchura como en la calidad del pigmento. No puedo decir si son menos negro debido a la edad; por haber perdido algo de pigmento con la espeleotema exfoliada; por estar imperceptiblemente cubierta por espeleotema; por estar en un sustrato ms suave o debido a algn mtodo de aplicacin. No he podido encontrar ninguno del material presumiblemente exfoliado.

El cuarto motivo est ubicado a la izquierda y parece ser de una cabeza con la boca y el ojo izquierdo visibles (Fig. 19b). El ojo derecho, si existe, est enterrado bajo una gruesa capa de espeleotema y la boca se ve por una lnea horizontal de ms de 2 cm de ancho. Curiosamente el color de este motivo es ms marrn que negro, recordando el color del pigmento utilizado en el marrn de Pen. La murcielaguina, para preparar la pintura, se encuentran cerca de la entrada a este pasaje.

Desentraar las complicadas secuencias de aplicacin de pigmentos y de la deposicin y disolucin de espeleotema no ser fcil. Estos cuatro motivos parecen estar relacionados formalmente y estn ubicados muy cerca uno del otro fsicamente. Se hicieron las pinturas con dos distintas tcnicas y, posiblemente, ejecutados con dos pigmentos diferentes. Estos se aplicaron durante o antes de la deposicin de espeleotema y luego posiblemente se vieron afectados por eventos de exfoliaciones.

Conclusin

Hay mucho ms por aprender aqu. Modelos para explicar los elementos entpticos (Lewis-Williams 1988) en los motivos (es decir diseos influidos por el artista en estado de trance), as como exploraciones semiticas se podran aplicar para indagar las posibles significaciones del arte. Hay que hacer anlisis fsicos y qumicos, as como el examen microscpico y la fotografa ultravioleta. Los pictogramas en el Pen y Vidal fueron fotografiados por el autor usando luz infrarroja, pero no aport nuevas informaciones. Por el uso de programas digitales como DStretch que manipulan el balance de color se podra revelar un poco mas sobre el arte bajo los depsitos de espeleotema (Fig. 21) Si ms de las poblaciones de la bacteria o del hongo se pueden ser localizadas podran ser identificadas y, tal vez, su presencia usada como indicador de una composicin del pigmento o de otra. Tal vez una evaluacin de la viabilidad de datacin directa, ya sea de algunos espeleotemas o de residuos de la pintura, podra dar lugar a permisos y financiacin. Un hueco lleno de pigmento en Vidal dara una muestra considerable de pigmento sin alterar la apariencia del arte. La bsqueda de material de exfoliacin va a continuar. Me doy cuenta de que estas son propuestas serias y espero sugerencias y crticas.

Fig. 21 de carbn, rea de Vidal despus de
manipulacin con el programa digital DStretch.

Agradecimientos

Agradezco a los Ministerios de Cultura y de Medioambiente de la Repblica Dominicana, al Museo del Hombre Dominicano en Santo Domingo, y a Alain Gilbert, Eric Labarre y Domingo Abru, quienes me permitieron acompaarles a visitar las cuevas de la Repblica Dominicana. Agradezco a Pedro Samuel Rodrguez-Reyes y Alexa Voss quienes me ayudaron en editar esta manuscrito.Tambin al gua Chichi y la familia de Isabel.


abreu

Preguntas, comentarios? escriba a: [email protected]

Cmo citar este artculo:

DuVall, Daniel. Arte rupestre del Sistema de Pen, Cumayasa,
Repblica Dominicana.

En Rupestreweb, /cumayasa.html

2014

Referencias

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