arte rupestre Cuz Cuz Chile interpretacion 433623

Patricio Bustamante Daz. [email protected] Fotgrafo, Investigador en Arqueoastronoma, Diplomado UC en Conservacin del Patrimonio.

Estudios realizados durante los ltimos 20 aos en diversos sitios arqueolgicos de El Choapa, IV Regin, Chile indican que:

Existe una relacin intrnseca entre las obras rupestres (petroglifos, tacitas, pictografas) y el entorno en que estas fueron concebidas. Este concepto define un sistema de coordenadas: culturales, biticas, geogrficas, climticas y astronmicas. (Bustamante 2005-1 http://rupestreweb.tripod.com/elmauro.html). El rescate integral de los diseos y la comprensin de las obras entre si y con su entorno requiere relevamientos de largo plazo (Bustamante, 2005-2 http://rupestreweb.tripod.com/bustamante.html).

El anlisis de los diseos y las construcciones encontradas en los sitios, indica que el concepto arte rupestre, no resulta apropiado para definir el objeto de estudio en la totalidad de sus expresiones, por lo tanto propone el concepto obras rupestres en su reemplazo (Bustamante 2005-3 http://rupestreweb.tripod.com/obrasrupestres.html).

El anlisis de la repeticin de diseos con caractersticas similares en el sitio Cuz Cuz, permite establecer comparaciones y realizar una propuesta de interpretacin, basada en las relaciones entre los diseos y el entorno. La relacin obra-entorno, permite detectar coincidencias que abren nuevas perspectivas en la interpretacin. Esto indica que estas obras deben ser estudiadas, interpretadas y conservadas en su ubicacin original, de acuerdo a los patrones culturales ancestrales, bajo los cuales fueron concebidas y elaboradas. Estos resultados permiten enunciar una ley que indica que: La Obra Rupestre es al Entorno como el Entorno es a la Obra Rupestre.

Histricamente el quehacer arqueolgico en torno al denominado "arte rupestre", ha orientado su labor al registro y documentacin de las obras presentes en los sitios, postergando su interpretacin y desciframiento, debido a las dificultades que ello implica y la falta de marcos tericos debidamente fundamentados.

El nombre arte con que genricamente han sido designadas estas manifestaciones, indica una valoracin general (no justificada) respecto a su contenido y significado. Toda obra humana posee un valor prctico y un valor esttico, pero este ltimo no es suficiente para definir todas las obras humanas como expresiones artsticas.

Nada en la historia de la antropologa ni en la etnologa, parece justificar la nocin de que estas obras, fueron realizadas con el solo fin del goce esttico, o que no cumplan ninguna funcin (no utilitarias). Estas ideas, solo parecen reflejar el estado actual de nuestros conocimientos.

Descifrar el contenido, el significado y el uso al que fueron destinadas estas obras, ha sido una tarea que rpidamente puede desalentar a quien la emprende, por: a) La falta de antecedentes y referencias a los que se puede recurrir. b) La falta de marcos tericos solidamente establecidos, que permitan orientar la lnea de investigacin. c) La nocin (injustificada) de que estas obras fueron realizadas por personas primitivas y que no tienen significado. d) La actitud de algunos investigadores que descalifican a quienes se atreven a incursionar en esta lnea. Estas crticas en numerosas ocasiones son realizadas sin aportar antecedentes slidos, que las justifiquen.

La ciencia se nutre tanto de los aciertos como de los errores. Ambos son inherentes a la labor del investigador en reas no exploradas.

Las interpretaciones propuestas aqu, no pretenden ser la explicacin definitiva. Son expuestas al conocimiento de los colegas investigadores, en la esperanza de que sean evaluadas, criticadas o complementadas con nuevos aportes.

La metodologa de anlisis de las obras en superficie, elaborada durante un perodo de 20 aos de trabajo de campo y aplicada para el relevamiento del sitio Cuz Cuz, es la siguiente:

1. Rastreo de todas las piedras del Sitio, realizando recorridos en diversas pocas del ao buscando dibujos bajo diversas condiciones de luz. Esto permite encontrar obras que normalmente pasan inadvertidas.

2. Relevamiento detallado de cada obra, dibujo preliminar, fotografa de la roca de soporte y los diseos que contiene, fotografa de la roca desde 5 puntos de vista con el paisaje de fondo (Martnez, Muoz y Trujillo, 1998), fotografa en 360 del paisaje circundante (Bustamante 2005-1). Cada dibujo es fotografiado bajo diversas condiciones de luz con el objeto de rescatar los diseos con el mximo de detalle (Bustamante 2005- 2).

3. Registro de la posicin geogrfica mediante GPS y altitud snm. de las rocas en que estn grabadas las obras individualmente.

4. Desde cada obra individual, registro de las orientaciones de todas las obras visibles, hasta la lnea del horizonte.

5. Cartografa de la ubicacin de las obras individualmente indicando su posicin en cartas geogrficas (1:50.000 IGM. Illapel 313730 - 710730) y fotografas areas (Fig. 1: Vuelo : SAF 78 — CH30 N 001729), 001730 y 001394) y cartografa digital (Fig. 2 y 3).

6. Anlisis de las caractersticas del paisaje circundante (relieve natural, alteraciones modernas del relieve, formas naturales de cerros y rocas, cercana de cursos de agua, vertientes, etc.).

7. Anlisis de variables astronmicas (medicin con brjula o teodolito de salidas y puestas de sol, luna, estrellas.)

8. Observacin y registro fotogrfico de eventos astronmicos, en relacin a las obras rupestres, en diversas pocas del ao. (Fig. 4)

9. Anlisis de los diseos en relacin con las obras del sitio y su entorno. Las obras no son consideradas como simples expresiones artsticas, an cuando poseen un innegable valor esttico. (Bustamante 2005-3).

- Lo esencial de esta metodologa, consiste en emplear mtodos de estudio no agresivos, esto permite mantener intacto el sitio durante y despus del estudio. No es aconsejable realizar ningn tipo de alteracin superficial. Solo en contadas ocasiones es necesario despejar de ramas y arbustos que impiden la visin del dibujo, el paisaje y los eventos astronmicos.

- No ha sido diseada para realizar un relevamiento, que permita justificar la alteracin posterior del sitio, ni la remocin o el traslado de las obras.

- Mantener el sitio inalterado permitir a futuras generaciones de investigadores, aplicar tcnicas desconocidas en la actualidad.

El sitio Cuz Cuz (3139'S - 7112' W - 890 msnm) est ubicado al sur de la confluencia de los ros Illapel y Choapa y a 6 Kms. Al poniente de la ciudad de Illapel, en la IV Regin de Chile. Las culturas presentes en esta zona han sido descritas por Gallardo (http://www.galileoii.ucn.cl/PDF/norte%20verde.pdf)

Para efectos de este estudio, los petroglifos han sido agrupados de acuerdo a la relacin visual entre ellos. Esto da como resultado la definicin de grupos. Esta relacin visual es considerada como una clave para la interpretacin de determinados diseos. La definicin de grupos es provisoria y podra sufrir modificaciones parciales en la medida que avanza la interpretacin de los diseos.

La figura 1 realizada en base a fotografas areas (Vuelo : SAF 78 - CH30 N 001729, 001730 y 001394), muestra el rea de trabajo que abarca el sitio Cuz Cuz. Los puntos de color, corresponden a los sectores donde estn ubicados los petroglifos. El punto rojo de mayor tamao, corresponde a la ubicacin de la escala desde la cual es posible realizar observaciones astronmicas (Bustamante 2005-2). Las lneas verdes corresponden a las direcciones de salida del sol en solsticios y equinoccios. La lnea de color lila, describe la orientacin Norte-Sur. El circulo rojo con lnea punteada muestra el rea aproximada representada en la figura 3.

La figura 2 realizada en base a un sistema de informacin geogrfica (Arc View 4), muestra en una vista tridimensional, el mismo territorio definido en la figura 1.

La figura 3 realizada en base a imgenes obtenidas de Google Earth (www.googleearth.com), muestra las caractersticas fsicas del territorio, el rea examinada y la superficie del sitio Cuz Cuz.

La modelacin en 3D de los sitios se hace indispensable, hoy existen variadas herramientas que permiten un registro detallado de las obras y del territorio en 3 dimensiones. La tecnologa lser permite por ejemplo, definir en modelos 3D extensas superficies (100 kms2 o ms) con cotas de nivel de 10 cms de altura y definicin de objetos de hasta 5 cms (http://www.combitech.se/survey/topeye/). Escaners Laser de diversas marcas pueden ser aplicados a las obras rupestres, para obtener reconstrucciones en 3D en alta definicin (ej. http://www.al-top.com/al_top/ILRIS-Caracteristicas.pdf.).

El empleo de estos sistemas ampliamente disponibles, resulta imprescindible en sitios que pueden sufrir alteraciones producto de la construccin de obras por parte de gobiernos o empresas. Esto implica una mejora sustancial en los mtodos de registro tanto de las obras como de los sitios arqueolgicos completos.

En cuanto a la interpretacin de las obras rupestres, diversos mtodos han sido descritos por distintos autores a travs del tiempo. A modo de ejemplo, Swartz y Hurlbutt (http://www.bsu.edu/web/01bkswartz/SPACEMI3.pdf), proponen un mtodo de anlisis basado en la arquitectura, filosofa social, religin, comportamiento animal, etologa humana y un modelo de espacio unificado. Jackson, Artigas y Cabello (2002) esbozan una metodologa para la interpretacin del arte rupestre del Choapa (IV Regin, Chile) basados en la relacin funcin-significado y en el paisaje intervenido y recreado como "naturaleza construida culturalmente", de acuerdo a lo expresado por Criado (1991 y http://www-gtarpa.usc.es/descarga/PublicacionCapa6.htm).

Relaciones de las obras rupestres y construcciones precolombinas, con el paisaje y la astronoma, han sido descritas recientemente en "Memorias del Simposio ARQ-13, ICA 51" (2004), por autores como Pitluga (pg. 21), Broda (pag. 77), etc. Cobo hace una descripcin de la relacin de una construccin en la latitud cero (ecuador terrestre), con el paisaje y la astronoma (pg. 113) entre otros autores. Boccas describe el uso de la topografa y la astronoma como auxiliar de la labora arqueolgica (http://www.ctio.noao.edu/~boccas/paper_arica.html), Belmonte describe el uso de la astronoma y el paisaje en contextos diferentes de las Amricas, pero semejantes en la metodologa empleada y en las observaciones resultantes (http://www.cabildodelanzarote.com/patrimonio/comuviernes2.doc). Illarregui (2003) analiza la Arqueologa del Paisaje http://www.sek.edu/Anuario/archivos/EmilioIllaregui.pdf.

Aproximaciones anteriores a un mtodo de desciframiento de las obras en la localidad de Cuz Cuz, fueron descritas por Boccas et al (1999), Bustamante (1991, 2005-1, 2005-2 y 2005 - 3).

La aplicacin de conocimientos astronmicos y la incorporacin de variables como el paisaje en el estudio y descripcin de sitios rupestres, hace posible la relacin de las obras en el sitio con estas variables. La Figura 4 describe un mtodo de anlisis grfico del entorno astronmico y del paisaje en el sector 1 en Cuz Cuz:

El dibujo muestra una reconstruccin tridimensional del sector 1, definido por la conexin visual de las obras en los 360 del horizonte, desde la cumbre de la escala (petroglifo 1-1), los accidentes del paisaje limitan la visin de las obras ms lejanas.

En el centro est ubicada la escala descrita en la figura 5 (representada por un punto grande en color rojo, en las figuras 1, 2 y 3).

En la figura 4, el crculo exterior representa el horizonte visible desde la cumbre de la escala frente al petroglifo 1-1. El lmite exterior (estelar), representa la esfera celeste. La escala est construida sobre el eje amanecer del solsticio de verano - atardecer del solsticio de invierno.

La figura 5 - a, muestra una reconstruccin de la escala y los petroglifos ubicados en la base y la cumbre de esta. Abajo (fig. 5- b), el despliegue en 360 del horizonte, permite mostrar las salidas y puestas de sol observadas desde la cumbre de la escala, esto constituye un calendario de horizonte.

El mtodo de anlisis sintetizado en la figura 4 y 5, permiti describir fenmenos similares presentes en el sitio Pucar de Chena (Bustamante 1996) y la distribucin de las primeras obras descritas en las leyendas de la etapa formativa de esta cultura Rapa Nui (Bustamante 2003, http://www.isladepascua.uchile.cl/arqueoastronomia_rapanui.html).

La literatura internacional registra diversos mtodos de interpretacin de las obras rupestres, propuestos por distintos autores a travs del tiempo.

Consens 1985, lvarez 1983, proponen mtodos estadsticos para el anlisis del arte rupestre. Ballereau y Niemeyer 1998, describen los sitios rupestres de la cuenca superior del ro Illapel. Niemeyer y Ballereau 2004 (http://www.scielo.cl/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0717-73562004000100004&lng=es&nrm=iso>. ISSN 0717-7356) analizan e interpretan con mtodos estadsticos el arte rupestre Molle, donde incluyen obras encontradas en el ro Illapel. Argello y Martnez (http://rupestreweb.tripod.com/sutatausa.html), advierten los sesgos que puede generar, el llevar a cabo estudios de carcter estadstico, iconogrfico o estilstico.

El anlisis puramente estadstico, nos informa respecto a la frecuencia, proporcin y difusin espacial de ciertos diseos. Pero al trabajar solo con elementos parciales, no es posible interpretar estos diseos en su integridad y en relacin al entorno en el cual fueron concebidos.

Gordon (1985), propone una relacin de las mscaras del Valle del Encanto en relacin con el culto al agua y los antepasados. Artigas (2002) interpreta el motivo de la lechuza, presente en las obras rupestres del Choapa (IV Regin, Chile), recurriendo a leyendas locales mestizas y relatos tradicionales de la brujera. Jackson et al (2002) describen las relaciones de las obras del Choapa con el paisaje, en relacin a demarcacin de lmites, indicar caminos, pasos entre los cerros, humanizacin del paisaje. Van Hoek (http://rupestreweb.tripod.com/tacitas.html), describe las tacitas ubicadas en el Valle del Encanto, al norte de Cuz Cuz y atribuidas tambin a la cultura Molle. Estos mtodos de anlisis permiten realizar una interpretacin de los diseos sin romper su estructura y relacionarlos con el entorno en que se encuentran.

No hay registros escritos de las creencias o actividades de la cultura Molle (300 — 700 dC.). Por lo tanto la interpretacin est limitada a los indicios proporcionados por las obras rupestres que elaboraron (Castillo 1985) y los vestigios que han subsistido tanto en superficie como en el subsuelo. Tambin es posible relacionar estos vestigios con los antecedentes arqueolgicos y etnogrficos de otras culturas que muestren caractersticas similares.

De esta forma, cualquier interpretacin o metodologa de interpretacin, deben ser consideradas solo como propuestas, que debern ser validadas, modificadas o refutadas por futuras investigaciones.

El concepto relaciones microespaciales, describe la relacin de los diseos en su contexto mnimo, es decir la superficie de la roca en la cual fueron grabados. Al realizar trabajo de campo resulta desconcertante comprobar que frecuentemente pequeas piedras sin aparente importancia, presentan abundantes diseos y por el contrario, rocas cercanas, que de acuerdo al criterio actual presentan aparentemente mejores caractersticas para servir de soporte a los grabados, no han sido utilizadas.

Una explicacin posible, est en las caractersticas propias del soporte: grietas, cambios de plano y la apariencia fsica de la roca.

Estas caractersticas unidas a su posicin en el espacio en relacin al paisaje y a otras obras existentes en el sitio, pueden explicar su eleccin como soporte .

En la actualidad, cuando un diseador requiere componer una figura, debe trabajar sobre una superficie bidimensional y generalmente monocroma. Pero, al estar la figura compuesta por varios diseos que deben ir juntos, el autor debe dividir la superficie en sectores.

Los antiguos constructores no disponan de superficies lisas y bidimensionales. El soporte disponible posea distintos planos, marcas y grietas que probablemente fueron utilizados como parte integrante del diseo. Este hecho puede proporcionar una va para intentar explicar una de las caractersticas de los petroglifos 1-3-1 y 4-2-1 (fig. 6).

La figura 6 muestra dos figuras antropomorfas con apndices ceflicos. Ambas figuras presentan los brazos abiertos y el brazo izquierdo cortado por una grieta. La grieta en este caso, parece estar representando un lmite que es cruzado por el personaje, posiblemente entre este mundo y el otro.

Los petroglifos cercanos a estas figuras, sugiere prcticas rituales. Ambos estn junto al ro (1-3-1, rivera norte y 4-2-1 rivera sur) y junto a pozas de agua que pudieron ser utilizadas como baos rituales. En el caso del primero est ubicado de tal forma que para pasar al grupo principal de petroglifos, es necesario pasar frente a l antes de cruzar el ro. Por esta circunstancia lo hemos bautizado como "El Guardin".

El personaje presenta dos apndices ceflicos, que en su interior exhiben lneas que parecen peldaos. Estos peldaos podran estar indicando el ascenso al mundo superior y descenso al mundo inferior, una de las caractersticas del trabajo de los chamanes, como es el caso de la machi entre los mapuche del sur de Chile y argentina (Elade, 1986, p.113 ). La ereccin de escalas y el vuelo exttico, son prcticas muy difundidas entre diversos pueblos (Elade, 1986). Es posible que los personajes con dos apndices ceflicos, presentes estas en las obras rupestres, representen esta caracterstica del quehacer de los chamanes.

Las obras no fueron elaboradas en el aire. Fueron construidas en relacin con: a) Otras obras. b) El paisaje. C) Eventos astronmicos relevantes, visibles desde algunas de ellas.

Las figs. 1, 2 y 3 muestran en tres formatos diferentes, la posicin de los petroglifos y tacitas en el sitio. Es posible apreciar como algunos de ellos estn alineados con eventos astronmicos observados desde la escala (fig. 5) (Bustamante 2005-1).

Algunas obras cercanas no coinciden con las alineaciones. Esto puede deberse a que: a) Se encuentran ocultos por el relieve. b) Cumplen una funcin diferente de la astronmica. c) Sus caractersticas y su estilo sugiere que fueron construidas en una etapa anterior a la construccin de la escala.

Del mismo orden de importancia es la visin que se obtiene de determinados accidentes del paisaje desde cada obra. Las cumbres o depresiones donde se produce la salida o puesta aparente del sol, aparecen luego reproducidas en parte de los diseos y en las formas de algunas de las rocas donde se ejecutaron los grabados.

La figura 7a muestra el petroglifo 2-3-1, la flecha roja muestra la direccin de la observacin. 7b muestra la salida del sol desde 2-3-1. La roca de soporte tiene en su parte superior una depresin en forma de V que reproduce la forma del horizonte tras el cual aparece el primer rayo de sol, lo cual es visible tambin desde la cumbre de la escala.

La figura 7c muestra la roca que sirve de soporte al petroglifo 1-8-1. La roca tiene la cumbre escindida, su forma recuerda una letra M, la flecha roja indica la direccin de la observacin. 7d retrata la salida del sol el 21 de diciembre desde la escala, tras un cerro con cumbre escindida, es decir con forma de una letra M. Desde el petroglifo 1-8-1, actualmente no es posible observar el horizonte oriente, pues el relieve fue alterado por la construccin de un puente de ferrocarril de gran altura.

Esto parece indicar que estas formas constituyen una clave para comprender la relacin de algunas de las obras, con el paisaje.

La figura 8a muestra el petroglifo 1-8-1, que ha sido interpretado como una representacin del grupo de estrellas que forman la constelacin conocida actualmente como Orin. El petroglifo est formado por trazos que representan un personaje masculino, con brazos y pies abiertos. Pequeas tacitas de 1 a 3 cm de dimetro, distribuidas en torno a la figura, han sido interpretadas como representacin de estrellas de la constelacin de Orin.

La figura 8a, es una composicin fotogrfica que recrea la salida de Orin durante el anochecer del 21 de diciembre (solsticio de verano). Este petroglifo, est ubicado en la cumbre de una roca semi cnica que a distancia semeja un trapecio, de doble cumbre (fig. 6-c). Un observador ubicado sobre el petroglifo en la posicin de la figura, probablemente reclinaba su cabeza que quedaba colgando en el borde de la borde de la roca, y al anochecer vea la salida de Orin por el oriente. En esa posicin vea su cuerpo proyectado en posicin invertida en el cielo nocturno, como lo representa la figura. En la actualidad no es posible reproducir esta visin durante la salida de Orin, pues el relieve del terreno ha sido alterado por la construccin de un puente de ferrocarril.

La figura 8b2, muestra el petroglifo 10-1-2, que representa un personaje con los brazos y piernas abiertos de manera semejante al anterior. Est grabado en la cara poniente de una roca con la cara frontal plana, cuya parte superior semeja un trapecio.

8b1, corresponde al registro de la salida de Orin durante el anochecer del solsticio de verano. El crculo inferior muestra la posicin del petroglifo 10-1-2. El circulo superior muestra las estrellas de Orin. Las estrellas aparecen como lneas, pues el obturador de la cmara permaneci abierto durante 20 minutos. El registro fue obtenido con una cmara Canon EOS ELAN, con lente semi fish eye, enfocado a infinito.

El petroglifo 10-1-2, est ubicado a 30 mts. del petroglifo 10-1-1 (Bustamante 2005-1, fig 3), que ha sido interpretado como una representacin de la salida de sol durante el solsticio de verano.

Es decir ambos petroglifos muestran relacin con eventos astronmicos ocurridos durante el solsticio de verano.

Los petroglifos 1-8-1 y 10-1-2: a) Muestran una relacin con la salida de Orin durante el anochecer del solsticio de verano. b) Las figuras que representan son interpretadas como la representacin de la constelacin de Orin. c) El soporte donde estn grabado presenta una forma aproximada de trapecio en su parte superior.

La figura 9 describe la posible relacin ro Illapel-Va Lctea para los antiguos habitantes del sitio Cuz Cuz. La gran roca que tiene en su cumbre el petroglifo 1-8-1, est ubicada a orillas del ro Illapel. Sobre el ro que corre de oriente a poniente, durante el solsticio de verano se ubica la va lctea, que tambin presenta un movimiento aparente de oriente a poniente. La piedra junto al ro tiene un posicin relativa similar a la de Orin respecto a la va lctea.

Un observador suspendido en lo alto de la roca experimenta una limitacin sensorial. Al estar boca arriba en la altura solo ve enfrente y alrededor las estrellas. El resto del campo visual est en la oscuridad. Sobre l la Va Lctea movindose de manera similar al ro. Todo lo que puede escuchar es el suave rumor de las aguas en el silencio de la noche.

La figura 10a, muestra el petroglifo 1-3-5. El sector inferior izquierdo del petroglifo (recuadro), est ocupado por tres elementos que parecen formar una secuencia: 1) Huevo, 2) Renacuajo, 3) Rana. Es decir la figura estara representando la metamorfosis de una rana (Fig. 10b). Las lneas verdes indican grietas que definen cambios de planos, que fueron aprovechados para grabar los diseos. 10b muestra una representacin actual del mismo fenmeno.

En el interior de cada uno de estos elementos, el diseo describe una secuencia subyacente: 11) Punto, 12) semicrculo, 13) Circulo.

Esta figura parece mostrar una relacin entre la observacin emprica de fenmenos como la metamorfosis de una rana y el pensamiento abstracto, representado por la evolucin del crculo como smbolo. El diseo completo podra estar relacionado con el proceso de iniciacin chamnica (Eliade 1986, pg. 139).

El motivo de la rana es comn en el arte rupestre americano. Arguello describe el motivo de la rana que entre los chibcha representa el alma (http://rupestreweb.tripod.com/colombia.html). Segn Marrimer (http://mc2.vicnet.net.au/home/gipri/web/public/subachoque.htm), la rana era sagrada y era una anunciadora de lluvia para los indios Muisca. En la regin del Choapa no existen relatos que permitan relacionar directamente las figuras de ranas del arte rupestre con un significado especfico. Pero al estar este motivo inserto en un sitio ceremonial, junto al ro y en relacin a smbolos de fertilidad y transformacin, es razonable interpretar el diseo del petroglifo 1-3-5 en relacin a estos significados.

La rana es un ser anfibio, es decir se relaciona con la tierra y con el agua. Pero tambin presenta una metamorfosis muy fcil de reconocer. Esto debi llamar profundamente la atencin a los antiguos habitantes de Cuz Cuz, que dejaron plasmada su observacin en la piedra.

Dos obras encontradas en la localidad de Cuz Cuz, pueden ser relacionadas con actividades ceremoniales de carcter chamanico.

El cuadro de la figura 11, muestra el anlisis grfico de 3 petroglifos pertenecientes a la cultura Molle 11 a y 11 b estn ubicados en la localidad de Cuz Cuz. En ambos dibujos el personaje de mayor tamao muestra las costillas como si se tratase de un esqueleto, pero ambos estn con los ojos abiertos, lo cual indica que no se trata de personas muertas. Adems tienen apndices ceflicos en forma de rayos. 10 c, ubicado en la localidad de Canelillo, fue descrito por Jackson et al (2002, p 47, Canelillo 19), los autores sugieren que podra tratarse de las figuras de un nio y un adulto.

Dentro del contexto del sitio Cuz Cuz, el sector 1-3 contiene una serie de obras como el petroglifo 1-3-5 (Fig. 11 a) que parecen indicar un uso de carcter ritual. Abarca ambas mrgenes del ro y para acceder a la ribera sur, hay que cruzar el ro y posiblemente hacer un bao ritual, ya que en este sector hay una poza de agua que pudo servir a estos efectos. De acuerdo a las caractersticas del lugar y las obras presentes en l, es posible intentar una interpretacin de los elementos que lo componen.

Aproximadamente 4 km. ro arriba, los sectores 4 y 5 muestran caractersticas similares al anterior como lo muestra el petroglifo 4-2-1 (fig. 11 b), al parecer la repeticin se debe a que el lugar inicial (4 y 5) fue replicado ro abajo en pocas posteriores en 1-3, en el cual se introdujeron cambios en los diseos y en la monumentalidad de las obras.

El cuadro comparativo (fig. 11), muestra una serie de coincidencias en los diseos. En 10 c las dos x en rojo indican que no hay informacin.

En la regin del Choapa hay abundantes leyendas tradicionales relacionadas con la brujera, (Artigas 2002). La ciudad de Salamanca ha sido reconocida tradicionalmente como residencia de brujos y su nombre tiene origen en la cueva (salamanca) donde se habran realizado los aquelarres.

Reichel-Dolmatoff (1985), explica por medio del fenmeno visual denominado fosfeno, algunos diseos y patrones simples, presentes en las obras de arte indgena. Pero los fosfenos solo explican una pequea parte de estas manifestaciones.

Alonso 2002 (http://rupestreweb.tripod.com/alucino.html), aplica la teora del consumo de alucingenos como justificacin para la elaboracin de patrones geomtricos en pinturas rupestres de Punta del Este, Cuba.

La experiencia chamnica relativa a los estados de conciencia acrecentada o xtasis, presenta una gran variedad y complejidad de fenmenos, como lo muestra el relato de Fernando Payaguaje, "El Bebedor de Yaj", (1990), las experiencias referidas por Makenna (1994), el estudio de Furst, (1992).

Esta experiencia puede ser descrita como el paso de una realidad a otra, trasponer un lmite, cruzar un umbral, muerte y renacimiento, etc. (Eliade 1986, pg. 139).

La figura 12a muestra el petroglifo 1-3-7, ubicado en la parte superior de una ladera, sobre el petroglifo 1-3-5. En l aparece la representacin de un meandro, con una forma semejante a un escudo en su extremo y un personaje con forma humana.

12b muestra el horizonte observado desde este petroglifo durante el amanecer del solsticio de verano. Los nmeros (1 a 4) indican la relacin encontrada entre las curvas en el dibujo con los cerros.

En 12c la representacin detallada del dibujo muestra la relacin entre la curva N:1, con la salida del sol en el solsticio de verano, la cual est indicada con un trazo que se desprende de la parte superior. Sobre la curva N:4 una lnea coronada con un circulo grande con un circulo menor inscrito, muestra una semejanza con el petroglifo 10-1-1 (Bustamante 2005-1, fig. 3). Este trazo parece estar representando una fecha que ya ha sido calculada, pero no ha podido ser confirmada con la observacin directa, pues las condiciones de cielo nublado lo han impedido en los dos ltimos aos.

El personaje representado sobre el meandro, es interpretado como una indicacin de paso entre los cerros, ya que efectivamente siguiendo el sendero cerro arriba, es posible cruzar al valle ubicado al norte por un portezuelo sealado con un grupo de petroglifos (fig 1, sector 8-1) que contiene un meandro similar.

La forma de escudo es interpretada como una simplificacin grfica de la confluencia de los ros Illapel y Choapa, que se unen 4 kms mas abajo del punto donde est ubicado este petroglifo. La lnea horizontal inferior representara el paso entre los cerros indicado por el grupo 8-1 y la lnea horizontal que cierra el escudo, parece representar un sendero antiguo que en su tramo inicial coincide con el del camino actual que une Illapel con Salamanca.

En el extremo superior del escudo hay un punto que ha sido interpretado como una seal que indica el cerro de los vientos. De esta interpretacin surgi la hiptesis que la indicacin de este cerro, podra estar sealando la ubicacin de nuevos petroglifos. Al recorrer posteriormente el cerro siguiendo estas indicaciones, encontramos una mscara de gran tamao grabada en una roca semi oculta, que no haba sido registrada todava por otros investigadores. En las cercanas, al otro lado del ro Choapa, encontramos un grupo de petroglifos que guarda semejanzas con los del grupo 1-3, y que actualmente estn siendo estudiados.

Siguiendo las indicaciones extradas a travs de la interpretacin de este petroglifo, fue posible anticipar la relacin con eventos astronmicos y descubrir un nuevo yacimiento de petroglifos ubicados en el valle del ro Choapa, ubicado tras los cerros. Esto podra tratarse de simples coincidencias. Pero, la capacidad de anticipar la ocurrencia de ciertos fenmenos, resulta ser una de las variables que permiten considerar como valida una hiptesis cientfica.

Imgenes como la grabada en el petroglifo 1-3-7, parecen ser mapas a los que les falta el cdigo con los smbolos que hace comprensible nuestros mapas actuales. Resultados similares han sido descritos por Quiros (2004) http://rupestreweb.tripod.com/diquis.html.

- Las obras obras rupestres son incomprensibles fuera de su entorno. Esto define un enfoque nuevo en el tratamiento de los sitios, indicando que al ser alterados, se produce una perdida irreversible de valiosa informacin.

- Las interpretaciones descritas arriba podran ser producto de: a) Simples coincidencias. b) Un desarrollo local, exclusivo de los antiguos habitantes de Cuz Cuz. c) Un desarrollo de la cultura Molle. d) Reminiscencias de antiguos conocimientos pertenecientes a las primeras culturas que poblaron Amrica. Despejar estas interrogantes ser tarea de las futuras investigaciones.

- A lo largo de toda Amrica hay diversos diseos que se repiten y que hoy son interpretados como simples coincidencias. Aplicando esta metodologa de anlisis u otras similares, es posible que demuestren ser algo ms.

- Funcionalidad y esttica, van de la mano en cada obra humana. La valoracin esttica es consustancial al ser humano. Pero no por ser apreciada como "bella" una obra, debe necesariamente ser calificada como obra de arte, significando implcitamente con esto que carece de utilidad, funcionalidad o contenido. Con esto no se pretende menoscabar el valor de estas obras en relacin con la historia del arte.

- En un mismo sitio es posible encontrar obras con significados diversos, as como es posible encontrar libros sobre diversos tpicos en una biblioteca actual.

- Una obra que presenta un dibujo aparentemente simple, puede estar expresando un conocimiento complejo. La necesidad de comunicar conocimientos complejos a travs de imgenes grficas (sin el lenguaje escrito), implica un esfuerzo de simplificacin. Esta extrema simplificacin puede llevar al observador inexperto a concluir una falta de significado o de contenido simblico.

Dos ejemplos modernos muestran la simplificacin de informacin compleja y la necesidad del contexto para explicar su significado:

Estas imgenes son una expresin clara del concepto obra-entorno. Los hipotticos investigadores de una civilizacin extraterrestre que traten de descifrarla, deber interpretar estas relaciones, de lo contrario, nunca sern comprensibles para ellos. Extradas de su contexto, las imgenes resultan incomprensibles.

Para la civilizacin extraterrestre que encuentre estas obras, nosotros seremos "el otro", as como "el otro" son para nosotros los antiguos constructores de las obras rupestres. Alejados en el tiempo, el espacio y pertenecientes a culturas diversas.

Quienes disearon estos mensajes, sintetizaron grficamente conocimientos tcnicos, pero adems procuraron que tuviera un aspecto agradable. As, estas dos obras nacidas de la necesidad humana de comunicar, tambin pueden ser consideradas como bellas, con una relacin equilibrada de sus elementos y sus proporciones. Entonces tanto las placas gravadas del Pioneer 10, como del Voyager 1, al igual que las obras rupestres, pueden ser analizadas desde un punto de vista esttico, (Velandia, 2001, http://rupestreweb.tripod.com/velandia.html), pero, claramente no son obras de arte en el sentido occidental de la palabra.

Implcito en esta placas existe la nocin de un entorno micro, es decir el relativo a la placa o disco donde fueron grabados y a la nave que les sirve de soporte. Pero tambin un entorno macro, es decir, el relativo al planeta tierra donde fue creado, la porcin de la galaxia y la poca en que fueron elaboradas.

1.- Cada obra rupestre tiene una relacin particular con su propio entorno micro, que es la superficie de la roca. En la reproduccin detallada del diseo (petroglifo, tacitas o pictografa), debe representarse con detalle las grietas, los cambios de planos y las variaciones superficiales de la roca que le sirve de soporte, pues podran ser parte integrante del diseo. Algunas rocas pudieron ser seleccionadas para elaborar los diseos, de acuerdo con estas caractersticas (Bustamante 2005- 2)

2.- La forma natural de algunas rocas podra ser determinante por su relacin de semejanza con formas naturales (humanas y animales), accidentes del paisaje y cerros. Esta condicin de semejanza, pudo determinar que fueran valoradas de acuerdo a un significado superior.

3.- La relacin de proximidad y visibilidad directa desde una obra a otra, parecen ser indicadores significativos, de las relaciones entre ellas. En algunos casos, las modificaciones modernas del relieve impiden la visin directa.

4.- Las relaciones espaciales de las obras entre si y con el medio circundante, deben ser consideradas y analizadas, con el objeto de dar una explicacin a la presencia, posicin y orientacin de las obras en el sitio.

5.- La repeticin de diseos y formas de soportes, en un mismo sitio, atribuibles a una misma cultura parece indicar: a) Una permanencia de los contenidos en el tiempo. b) Una cosmovisin que presenta conceptos estables en el tiempo. Permite establecer comparaciones y sugerir explicaciones respecto al significado de los mismos.

Una explicacin para esta duplicacin (fig. 11), es que a juzgar por los diseos y las caractersticas de las obras, estas fueron confeccionadas en pocas diferentes. La primera poca correspondera a las obras ubicadas ro arriba y de mayor simplicidad en los diseos y los soportes. La segunda poca correspondera a las obras ubicadas ro abajo (relacionadas con la escala), en que es posible apreciar en general una mayor monumentalidad y calidad en la confeccin.

- Los significados posibles de una obra rupestre pueden ser mltiples. Para abordar su interpretacin es necesario considerar la relacin obra - entorno.

- La aparente simplicidad de los trazos y los diseos representados en las obras rupestres, resulta engaosa. Un diseo rupestre integra diversas dimensiones:

Micro: 1) Alto, 2) Ancho, 3) accidentes de la superficie, 4) Volumen del soporte.

Macro: 1) Cultural (que define tambin su relacin temporal), 2) Bitica, 3) Geogrfica (relacin espacial de las obras entre si y con el paisaje, 4) climtica, 5)Astronmica.

- Reproducir el diseo rupestre en una hoja de papel blanco, representando los trazos como simples lneas negras y con un somero esbozo del volumen de la roca, lo convierte en una expresin grfica de solo 2 dimensiones, (ancho, alto), es decir descarta informacin (grietas, cambios de planos, forma del soporte) que resulta relevante al momento de interpretar el significado de los diseos.

- Las relaciones obra - entorno descritas, indican que estas deben ser declaradas universalmente como Bienes Culturales Inmuebles, es decir que no pueden ser trasladadas desde su emplazamiento original. La excepcin, la construyen aquellas obras realizadas en rocas de pequeo formato, transportables por una sola persona siempre y cuando se pueda demostrar que su traslado no perjudica su relacin espacial con el entorno.

- El sistema de referencias que hace comprensibles las obras rupestres, fue establecido de acuerdo a los patrones culturales ancestrales, bajo los cuales fueron concebidas y elaboradas.

- Las relaciones encontradas permiten enunciar una ley que indica que: la Obra Rupestre es al Entorno como el Entorno es a la Obra Rupestre.

"La mayora de las ideas fundamentales en la ciencia son esencialmente sencillas y, por regla general pueden ser expresadas en un lenguaje comprensible para todos ". Albert Einstein. Homenaje a los 50 aos de su fallecimiento.

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